
Cómo prevenir la diverticulitis
Los divertículos son pequeñas protuberancias en forma de saco que se pueden formar en el revestimiento del aparato digestivo. Se suelen presentar con mayor frecuencia en la parte inferior del intestino grueso (colon). Los divertículos son frecuentes, especialmente, después de los 40 años de edad, y rara vez provocan problemas.
Sin embargo, a veces, uno o más de los sacos se pueden inflamar o infectar. Esa afección se conoce como «diverticulitis». La diverticulitis puede provocar dolor abdominal intenso, fiebre, náuseas y un cambio significativo en los hábitos intestinales.
La diverticulitis leve se puede tratar con reposo, cambios en la dieta y antibióticos. La diverticulitis grave o recurrente puede requerir cirugía.
Los signos y síntomas de la diverticulitis comprenden:
- Dolor, que puede ser constante y persistir por varios días. Por lo general, el dolor se siente en el lado inferior izquierdo del abdomen, pero también puede manifestarse en el derecho, especialmente en las personas de ascendencia asiática.
- Náuseas y vómitos.
- Sensibilidad abdominal.
- Estreñimiento o, con menor frecuencia, diarrea.
Por lo general, los divertículos se producen cuando algunas partes naturalmente débiles del colon ceden bajo presión. Esto causa que sobresalgan unas bolsas del tamaño de una canica a través de la pared del colon.
La diverticulitis se produce cuando los divertículos se rompen, lo que causa inflamación, una infección o ambas cosas.
Prevención de la diverticulosis
La mejor prevención de la diverticulosis es mantener una dieta equilibrada que incluya la suficiente cantidad de fibra (25 a 30 gramos diarios para un adulto). Algunos alimentos ricos en fibra son:
Frutas: como manzanas, melocotones, peras, plátanos y mandarinas.
Hortalizas: como brócoli, calabacín, zanahoria, guisantes, acelgas, coles de Bruselas, espinacas, espárragos, palmitos, tomates, patatas….
Legumbres: alubias, lentejas, garbanzos…
Alimentos integrales: pan, cereales, pasta, arroz…
En el caso en el que alguna situación no permita el consumo mínimo aconsejable de fibra a través de los alimentos que la contienen, existen suplementos de fibra, que también pueden aportar la cantidad necesaria.
Es aconsejable que las personas que hayan padecido ya una diverticulosis eviten la ingesta de nueces y de semillas.
La administración de fármacos que ayuden a formar el bolo fecal como el Plantago ovatapuede ayudar a disminuir la presión dentro del colon y evitar la formación de los divertículos, junto con el resto de medidas mencionadas anteriormente.